Pa?ses Bajos abri? la ronda de de los octavos de final y se instal? c?modamente en la de cuartos a la espera de rival. La progresi?n futbol?stica de Estados Unidos no alcanza a?n para batir a un equipo europeo en una eliminatoria donde se exige el grado m?ximo de competitividad. Solo una vez hab?a superado esta criba el conjunto americano, y la pas? ante México en 2002. Tiene cuatro a?os, hasta el Mundial que coorganizar? con mexicanos y canadienses, para subir el pelda?o que le falta.

M?s informaci?n (Auto)


T?tulo noticia (Auto)






Un grado de maduraci?n que ya ha adquirido Pa?ses Bajos, que cuando no mete la pata y se queda fuera del Mundial (como en Rusia 2018), suele llegar lejos (subcampeonato y tercer lugar) en sus apariciones. Carece de los t?os geniales que enamoraron a varias generaciones, pero ha edificado un equipo disciplinado para retroceder y organizarse en defensa.

Ante Estados Unidos supo gestionar el resultado ante un rival que le quit? el bal?n. Gregg Berhalter, su seleccionador, aprendi? el abecé durante su estancia como futbolista en esas tierras. Era la época del happy flower. A fuerza de disgustos fueron aprendiendo los naranjas.

Aguantaron los momentos de apuros, que fueron varios, y asestaron golpes letales: uno al principio para gestionar el marcador, otro al filo del descanso para salir en la segunda parte relajados y seis minutos después de que Estados Unidos hubiera reducido distancias y se animara.

En esa obra colectiva naranja, las acciones m?s relevantes tuvieron nombre propio. Memphis Depay abri? el camino del triunfo y dio muestras de que va adquiriendo el ritmo superada ya su lesi?n, aunque luego meti? la pata en una cesi?n atr?s que Wright estuvo a punto de aprovechar. Lo evit? Denzel Dumfries, un tipo que refleja la transformaci?n asociada a la selecci?n y al cambio de nombre. Ya no hay extremos en Holanda, sino carrileros en Pa?ses Bajos.

Combinaci?n modélica

El portento f?sico que es Dumfries exhibi? su finura en el pase y la capacidad de su cerebro para conservar la lucidez después de carreras interminables cuando dio los dos centros de los dos primeros goles y remat? el tercero. Tras un servicio desde la otra banda de Daley Blind, su sos?as en la izquierda, y que hab?a anotado el segundo tanto calcando casi la acci?n del 1-0, nacida de una jugada cosida a pases desde el ?rea propia a partir de Frenkie de Jong.

Fue una combinaci?n modélica, de esas de v?deo de escuela de entrenadores en los dos sentidos: en el positivo, por la progresi?n acompa?ada con la rapidez suficiente para hacerla casi indefendible al momento, y en el negativo, porque ese bal?n no puede recorrer todo el campo hasta la red propia sin ser obstaculizado.

Continu? jugando como si tal cosa Estados Unidos, olvidadizo, y encaj? otro tanto de parecida factura, sin haber vuelto a acercarse al ?rea naranja desde que Pulisic hab?a estrellado un tiro al gigantesco cuerpo de Noppert.

Solo se a?adi? un minuto a la primera mitad, algo excepcional en este torneo, lo que prueba el aprovechamiento del tiempo, sin VAR, por fin, y sin fricciones. De guante blanco, con solo tres faltas, result? el duelo de equipos con escasa o nula agresividad. Si Estados Unidos pretend?a retrasar los preparativos del pr?ximo Mundial ten?a que apretar mucho m?s. Elev? su agresividad, multiplic? sus faltas, pero también lo hizo Pa?ses Bajos.



أكثر...