Una célebre bloguera tiene programada hoy su salida de la c?rcel tras cumplir cuatro a?os por informar sobre el confinamiento de Wuhan en las primeras y confusas semanas de la pandemia del coronavirus. Zhang Zhan fue condenada por un tribunal de Shangh?i por los delitos de “buscar pelea y ocasionar problemas”, una gaseosa f?rmula que la justicia china aplica a menudo contra la disidencia pol?tica.

A ?ltima hora del d?a no se sab?a a?n si Zhang, como contempla la sentencia, hab?a sido liberada. No lo ha confirmado su familia, a la que se presume presionada por las autoridades para que se aleje de los medios extranjeros, ni por el portavoz del Ministerio de Exteriores, Wang Wenbin. “No dispongo de esa informaci?n pero puedo deciros que China es un pa?s regido por la ley y que todo el que la viola es castigado”, ha dicho en la rueda de prensa diaria.

Zhang ya hab?a tenido roces con la justicia. Un a?o antes hab?a apoyado desde Shangh?i las hongkonesas revueltas de los paraguas y pedido el fin del Partido Comunista de China. En Wuhan mostr? los hospitales atestados de enfermos y las tiendas vac?as en videos que colgaba en plataformas como Wechat, la alternativa china a Whatsapp, o Twitter y Facebook, censuradas en su pa?s. Hab?a cubierto los 600 kil?metros que separan su Shangh?i natal de la capital de Hubei, ignorando la prohibici?n de viajar, y en el epicentro de la pandemia anim? a la poblaci?n a salir a la calle porque, en su opini?n, el Gobierno les “hab?a encarcelado y restringido sus libertades con la excusa de la prevenci?n pandémica”. Similares cuarentenas fueron replicadas por casi todos los gobiernos del mundo en los siguientes meses. En un v?deo se la ve derribando una valla de uno de los puestos médicos que en aquellos d?as intentaban controlar una nueva pandemia de la que se desconoc?a casi todo.

Zhang fue acusada de diseminar informaci?n falsa y aceptar entrevistas con medios extranjeros, seg?n una fuente cercana citada en su d?a por el diario hongkonés South China Morning Post. Los medios son Radio Free Asia, sufragado por el gobierno estadounidense, y el diario Epoch Times, brazo propagand?stico de Falun Gong, que difundieron falsedades durante los d?as m?s crudos de la pandemia. El primero habl? de enfermos arrojados a hornos crematorios en bolsas y el segundo us? las bajas de telefon?a m?vil para airear cifras de decenas de millones de muertos.

Huelga de hambre

Zhang form? parte de una decena de individuos que inform? sobre el terreno de las vicisitudes de los 11 millones de habitantes de Wuhan cuando el Gobierno intentaba dar una imagen de control y evitar que el p?nico se expandiera por el pa?s. Todos ellos corrieron una suerte parecida pero s?lo Zhang, una antigua abogada, continuaba encarcelada. Sus allegados han alertado de sus achaques durante estos a?os de encierro que han quedado agravados por sus huelgas de hambre. Su peso cay? desde los 75 a los 40 kilos aunque su salud se ha recuperado en los ?ltimos tiempos. Uno de sus abogados la describi? a?os atr?s con una sonda conectada a su nariz y atada de manos para impedir que se la arrancara. Amnist?a Internacional describi? esa alimentaci?n forzosa como tortura.

La bloguera recibi? en 2021 el premio a la Libertad de Prensa por Reporteros Sin Fronteras. La organizaci?n hab?a pedido en su cuenta de Twitter a la comunidad internacional que presionara a las autoridades chinas para conseguir hoy su “incondicional liberaci?n”.



“Su encarcelamiento nos recuerda a todos que el Gobierno chino a?n no ha rendido cuentas por encubrir el brote de covid-19 ni por los abusos asociados con sus restricciones draconianas contra la pandemia”, ha dicho Maya Wang, directora en Asia de Human Rights Watch.



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