Sra. Fort, no he utilizado ni el apreciada, ni querida, pues no la conozco, ni tampoco quiero que se entienda que utilizo esas formalidades de forma condescendente para ser criticado nuevamente.

La semana pasada escrib? un art?culo en el que expresaba mi fuerte preocupaci?n por la evoluci?n econ?mico-financiera de nuestro club, en el que tan solo intentaba alertar a distintos p?blicos objetivos que exist?a una cierta deriva de nuestro estimado FC Barcelona y que esa situaci?n deb?a ocuparnos, con toda seguridad, una opini?n muy personal de la cual puede discrepar usted y la junta directiva.

Me dirig?a a los culés en general, que no tienen m?s militancia que nuestra bandera y nuestros colores, sin pretender interpelar a ning?n grupo vinculado a una visi?n pol?tica o un ismo culé (ni partidos pol?ticos ni familias de pedigr? culé de las que usted s? forma parte).

La sociedad civil son aquellos que se sienten catalanes de coraz?n y desean actuar en el amplio ?mbito social y cultural de nuestro pa?s, sin que les diferencie en su capacidad de acci?n, su situaci?n econ?mica, social o pol?tica. Interpelé a varios colectivos, de los cuales solo los exjugadores recientes podr?an ser ricos con toda seguridad, pero no me dirig?a a ellos por eso, sino por su barcelonismo. Ni soy ni me considero rico; aunque la vida no me ha tratado mal profesionalmente, ni escojo mis ?mbitos de relaci?n en lo personal en funci?n de los ingresos y el patrimonio de aquellas personas con las que comparto tiempo y proyectos.

Creo que fui tan claro como contundente, por tanto, de subliminal, nada de nada, entre l?neas no quiera leer, pues no hay texto y todo es imaginaci?n suya. No articulé tampoco ning?n posicionamiento sobre el modelo societario que debe tener el Barça del futuro, eso solo le corresponde decidirlo a nuestra masa social. Aunque mi opini?n sobre ello es muy clara, no lo dude. Quiz?s lleguemos a la situaci?n en la que no habr? opci?n alternativa.

Mi art?culo, absolutamente libre de representar a cualquier grupo organizado, ni de un posicionamiento editorial de este peri?dico, que me permite la libertad de c?tedra, no articulaba m?s relato que la delicada situaci?n financiera, la gesti?n ajena a ejecutivos de prestigio que permitieran al club tener un modelo estratégico para competir en el mercado ante nuestros rivales en el campo y fuera.

Finalmente le puedo asegurar un convencimiento, cuando se acepta ser vicepresidenta institucional, deber?a entender que ejerce cada d?a y cada acto comunicativo representando a la instituci?n desde ese cargo, eso es indisociable mientras ejerza esa funci?n. Se lo digo con todo el respeto. En las redes queda su pataleo en forma de tuit, aqu? mi respuesta, que Twitter lo carga el diablo. Si lo desea, le invito a un café, proponga lugar y hora, pues dialogando, a veces, se entiende la gente aunque tenga posturas ideol?gicas muy alejadas, como es el caso.*



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