A pesar de que todas las encuestas apuntan a una victoria socialista, el candidato de Junts, Carles Puigdemont, no pierde la esperanza de ser la sorpresa de la noche electoral de este domingo. Seg?n el partido, el objetivo est? a pocos votos y es posible si consiguen movilizar al votante independentista desencantado, aquel que a?n no ha escogido papeleta o que se decanta por partidos ahora extraparlamentarios.

Por este motivo, en el cierre de campa?a en el municipio francés de Elna, y ante unas 3.500 personas, seg?n el partido; Puigdemont ha apelado al voto ?til y ha pedido no dejar pasar la oportunidad de atrapar y, si se pueden, sobrepasar al PSC.

"El momento de decir basta es ahora, no dentro de cuatro a?os", ha exclamado el expresident, apelando al independentismo m?s irredento y que quiere volver a la confrontaci?n con el Estado. "Se?ores de Madrid, prep?rense, porque ya volvemos", ha exclamado, al tiempo que ha asegurado que el momento de "volver", tanto él como el 'procés', ha "llegado" y "es este domingo". As?, definiendo su candidatura como el "voto del golpe encima de la mesa", ha avisado de que su eventual victoria tendr?a "consecuencias".

También al regreso de Puigdemont se ha referido el secretario general del partido, Jordi Turull, que ha reclamado no desaprovechar la ocasi?n de "hacer que pueda volver victorioso un presidente al exilio". "La historia nos ha convocado", ha aseverado, tratando de dar toda la épica posible al momento. En la misma l?nea, y tras asegurar que durante sus noches de c?rcel so?aba con el "momento de la reactivaci?n", ha pedido no hacer votos "sofisticados" que puedan dar la presidencia a Salvador Illa.

"Reanudar" o "enterrar" el 'procés'

También el candidato por Girona, Salvador Vergés, una de las figuras en ascenso dentro del partido, ha asegurado que este 12 de mayo est? en juego "reanudar" el 'procés' o "enterrarlo durante unas cuantas generaciones". Mientras, la cabeza de lista de Tarragona, M?nica Sales, m?s pragm?tica, ha pedido el voto por Juntspara cambiar un Govern que asegura que "no consigue salir adelante". As?, la hasta ahora portavoz en el Parlament ha atribuido a ERC el "desastre de los resultados PISA" y que los médicos se vayan fuera del Estado a buscar mejores salarios, mientras que "se tienen que contratar otros que no entienden el catal?n".

También a la lengua se ha referido la candidata de por Lleida, Jeannine Abella, que ha recordado una de las polémicas de la campa?a, cuando Illa se refiri? a su provincia como Lérida. "?Quién quiere un presidente que menosprecia su lengua?", se ha preguntado de forma ret?rica. Y, finalmente, la presidenta del partido, Laura Borràs, ha pedido votar a Junts, porque asegura que es "lo que molesta a Espa?a". Adem?s, Borràs ha asegurado que ahora es momento de "conectar con el 2017" y ha aseverado que Puigdemont "se presenta para terminar el trabajo".

Todo ello en una campa?a donde, no obstante, ha vuelto a aparecer el expresident Jordi Pujol, del que Junts hab?a tratado de desvincularse desde su confesi?n para no tener que sostener la losa de la corrupci?n. Este viernes le ha citado Turull, recordando su encarcelamiento durante la dictadura. La misma jornada que ha terminado con un nuevo v?deo en las redes en el que Pujol reitera su apoya a la candidatura de Puigdemont.

Campa?a sin pantallas

As? ha terminado una campa?a at?pica en el sur de Francia, por la situaci?n judicial de Puigdemont y ante el riesgo de ser detenido si cruza la frontera, pero con el foco puesto en una amnist?a que le puede dar un regreso sin acarrear consecuencias penales.

Junts hab?a planificado el cierre de la carrera electoral en Barcelona, y lo planteaban como la ?ltima pantalla antes del regreso del expresident a Catalu?a, una vez se apruebe la ley de amnist?a. Sin embargo, la formaci?n decidi? a principios de semana mantener el calor de la presencialidad y seguir con la movilizaci?n de autobuses hasta el sur de Francia. Una estrategia que consideran que ha sido un "éxito" con m?s de 15.000 participantes a lo largo de los 15 d?as de campa?a, siempre seg?n cifras del partido.

El lugar escogido para este viernes, sin embargo, no ha sido el pabell?n de Argelers, bautizado por el propio Puigdemont como "el mitin?dromo", sino el patio de las antiguas escuelas de Elna. Un emplazamiento que no es nuevo para Puigdemont, ya que fue aqu? donde el expresident present? su candidatura hace poco m?s de un mes.

El mismo espacio para culminar una campa?a que Puigdemont ha tratado de presentar como un duelo entre él y el candidato del PSC. Y en la que, por contra, el expresident ha evitadoel cuerpo a cuerpo con Esquerra, a pesar de que desde la candidatura temen un nuevo tripartito.La estrategia ha sido una campa?a sin riesgos, de bajo perfil, en la que se ha vendido m?s épica y movilizaci?n que promesas program?ticas. Una demostraci?n de fuerza antes del veredicto final, el de las urnas.



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