Con el viento de cola del exitoso cord?n sanitario contra la ultraderecha en Francia, el Gobierno ha elevado la presi?n sobre Alberto N??ez Feij?o para que se desprenda de sus socios y facilite un acuerdo sobre la distribuci?n de migrantes menores entre las comunidades aut?nomas. Poco después de que Santiago Abascal elevase su ?rdago al amenazar con “dar por rotos” los gobiernos de coalici?n si el PP entra en el acuerdo, la vicepresidenta primera, Mar?a Jes?s Montero, ped?a al l?der del PP poner pie en pared. “Feij?o calla y busca excusas. Nosotros le decimos que rompa esos gobiernos porque son un retroceso en los avances”, lo conmin?.

En el marco de un acto en Ferraz sobre “recortes” en materia de igualdad a nivel territorial, principalmente en ejecutivos de coalici?n entre PP y Vox, Montero achac? la “negativa a la solidaridad” con Canarias a la influencia de los de Santiago Abascal sobre los populares. “Le decimos a Feij?o que imponga en sus comunidades auton?micas una solidaridad que ten?a que ser voluntaria, pero que a base de discursos xen?fobos hacen que no podamos distribuir de forma adecuada a estos ni?os que llegan a las costas canarias. Por eso ahora necesitamos impulsar esta ley”, a?adi? en referencia a la reforma de la ley de extranjer?a para hacer obligatorio el reparto.

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Desde Génova se inclinan por aceptar la “solidaridad” en la acogida para aminorar la presi?n migratoria de territorios como Canarias, pero sin apoyar la reforma de la ley. A 48 horas de que se celebre la conferencia sectorial con la presencia de todas las comunidades aut?nomas para discutir la propuesta de reforma pactada entre el Gobierno y el ejecutivo de canarias, la presi?n sobre los populares viene tanto de sus socios como de los socialistas.

En el Ejecutivo recetan que el PP siga los pasos de la derecha moderada en Francia y aplique un “cord?n sanitario” para devolver los gobiernos auton?micos con Vox “al cauce democr?tico del reconocimiento de la diversidad y la pluralidad”. El PSOE ya ofreci? sus votos a la presidenta balear, Marga Prohens, para echar al*actual presidente del Parlament de Vox. La propuesta, que fue rechazada, consist?a en dar su apoyo para elegir a un presidente del PP ante la*situaci?n de “emergencia democr?tica”*derivada de las actuaciones del presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, quien en el pleno anterior rompi? una fotograf?a de una v?ctima del franquismo.

Desde la c?pula de Ferraz explicaron que estaban dispuestos a extender esta oferta en otros parlamentos auton?micos para aislar a Vox. Un cambio sustantivo respecto al*cord?n sanitario*que tras las elecciones municipales y auton?micas vincularon a que el PP rompiese con la formaci?n de ultraderecha en todas las instituciones. Con todo, en la direcci?n socialista admiten que los populares nunca recoger?n este guante y no han concretado ninguna propuesta para hacer efectivo este cord?n sanitario que reclaman al calor de los resultados de las legislativas francesas.

Golpe de autoridad

“Si el PP acepta el reparto, ser? colaboracionismo. Vamos a pedir que se hagan recursos, que se trate de impedir”, subrayaba esta ma?ana el l?der de Vox. Intentando dar credibilidad a su ?rdago, desde la sede del partido reclamaba que “si el PP en alguna de esas regiones quiere sentarse a pactar con S?nchez que nos lo diga, no es un problema. O s?. Pero que nos lo diga ya” porque “abandonaremos esos gobiernos”.

Los socialistas reclaman a Feij?o un golpe de autoridad tanto frente a las dudas de los presidentes que gobiernan con Vox para reformar la ley de extranjer?a como ante las amenazas de Abascal. Si bien, en privado no muestran demasiado optimismo y reconocen que pese a pactos como la renovaci?n del Consejo General del Poder Judicial no se producir? un giro radical en sus relaciones con el l?der de la oposici?n. Es m?s, incluso reconocen que tiene que subir el tono para “administrar” el acuerdo con una parte de su partido.



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